Hace algunas semanas te explicamos los beneficios de elegir puertas y ventanas de aluminio para tu hogar. Pero, además de un buen material, otro aspecto importante a considerar es el sistema de apertura de las mismas, buscando aquel que nos sea más práctico, funcional, seguro y fácil de usar.

La apertura elegida para nuestra puerta o ventana es un factor esencial a tener en cuenta si queremos que se adapte a nuestras necesidades.

Hoy te vamos a explicar algunas de las aperturas más habituales.

 

Puertas y ventanas practicables

En este tipo de apertura, la puerta o ventana se une a su marco mediante bisagras. Es la apertura más común y la que nos ofrece un mayor aislamiento, evitando pérdidas de energía gracias a su cierre estanco. 

Por contra, este tipo de apertura necesita un espacio extra al abrirse. Aspecto que deberemos tener en cuenta si no contamos con mucho espacio para ello.

Dentro de las puertas y ventanas practicables, la apertura más común es el giro vertical, tanto para puertas como para ventanas, aunque existen otras posibilidades.

 

Abatible y Batiente

La apertura abatible y batiente es aquella en la que la hoja se abre sobre un eje vertical u horizontal situado en un extremo de la ventana, permitiendo una apertura hacia el interior o el exterior, según el caso.

La principal característica de este tipo de apertura es el alto valor de aislamiento acústico y térmico que nos aporta.

 

Oscilante

La apertura oscilante es una variación de la batiente (las bisagras se encuentran en el eje horizontal de la ventana) y consiste en una pequeña inclinación, hacia dentro o hacia fuera del hogar, creando una apertura que permita el paso de aire y una correcta ventilación.

Estas ventanas son ideales para aquellas estancias pequeñas y con poco espacio que no requieran grandes aperturas para su ventilación, o sean espacios de mayor privacidad, como los lavabos.

 

Oscilobatiente

Las aperturas oscilobatientes se caracterizan por combinar las dos anteriores aperturas. De esta manera, tenemos la posibilidad de abrir la ventana con una pequeña inclinación para ventilar el espacio y, a la vez, también nos permite una apertura total del eje vertical.

En las ventanas oscilobatientes nos encontramos bisagras en ambos ejes de la ventana (horizontal y vertical) para permitir las dos posibles aperturas.

Aunque lo más habitual es encontrarlo en ventanas, este tipo de sistema también se puede aplicar a puertas de paso, como accesos a terraza o puertas de cocina.

 

Pivotante

Las ventanas pivotantes se caracterizan por ser un tipo de apertura con sujeción en un eje central vertical. La ventana o puerta gira en torno a ese eje central como si fuera una puerta giratoria.

Este tipo de apertura pivotante se utiliza cada vez más en aquellas puertas de interior de estilo minimalista y contemporáneo ya que las bisagras quedan totalmente ocultas. Además, ofrecen una amplia apertura, seguridad y confort.

 

Basculante

La apertura basculante es igual que la anterior pero el eje central tiene una rotación horizontal (en las pivotantes la rotación es vertical).

Este tipo de ventanas son las más utilizadas en buhardillas y tejados.

 

Puertas y ventanas deslizantes

A diferencia de las puertas y ventanas practicables, que se caracterizan por estar unidas al marco mediante bisagras y abrirse ocupando espacio fuera del marco, los sistemas deslizantes o correderos se abren sobre su mismo plano sin necesidad de espacio. 

Este tipo de aperturas nos permiten delimitar espacios, como la vivienda y el jardín.

 

Corredera

La puerta o ventana corredera tradicional es aquella que se abre deslizándose de manera horizontal sobre su mismo marco; de esta manera la apertura no necesita de espacio adicional.

 

Corredera osciloparalela

Las puertas y ventanas osciloparalelas también tienen una apertura deslizante pero, a diferencia de las anteriores, en este caso el cierre es hermético sobre un mismo plano. De esta manera se consigue un mayor aislamiento térmico y acústico.

 

Corredera elevadora

Este tipo de puertas y ventanas son las menos frecuentes y consisten en dos hojas con un cierre en forma de acordeón. En este caso, se pierde la principal característica de las puertas y ventanas correderas ya que, para su apertura necesitaremos espacio más allá de su marco. 

Estos son los principales sistemas de apertura de puertas y ventanas. Si necesitas más información o un asesoramiento personalizado, no dudes en contactar con nosotros y te ayudaremos a buscar la mejor solución para tu hogar.